Desvaríos de opinión viajando por Catalunya

Opinion

juanantoniosanchez2014buenaLa Constitución española de 1978 mañana debería ser según el Sr. Mas y otros pocos aliados a la causa independentista, un instrumento democrático obsoleto a la vista de Catalunya, demasiado oneroso a la complicidad de estos por pasar página antes de caer en las garras de la Justicia; salvaguardar sus espaldas atrincherados en su parcela sin querer dar la cara de las gravosas circunstancias que sus antecesores crearon en la sociedad catalana. Es fácil salirse de la trayectoria si con ese regate sales airoso de las responsabilidades que en su día se ocultaron por el idealismo de aspirar a un poder sin importar las consecuencias de tanta farsa sumergida.

Y es qué, según mandan los cánones prefijados por los partidos que aspiran a conseguir una Constitución propia, la cual a la vista de sus patrañas, se fundamentará según convenga a la decisión de algunos en dividir a la nación española como patria de unos pocos y reconocerá su incapacidad de solidaridad entre todos sus territorios, le queda poca lógica de ser adoptada por la mayoría de la sociedad en Catalunya, al darse cuenta del despropósito al que se enfrentan con esta medida. La sirena de alarma suena en la Patronal catalana, la luz roja que da el aviso para dejar el suelo en el que han estado ubicadas comienza a ser visible y con ello, dar al traste con miles de empleos. A no ser que la idea preconcebida de los independentistas sea la del autoconsumo, la supervivencia mediante los productos de la tierra y el querer hacer la culebrilla ante la alta jerarquía europea atrayendo a los inmigrantes que estime oportuno con los que solucionar posibles problemas de abastecimiento en la mano de obra precaria. No quieren darse cuenta de que la UE les da la espalda ante la ilegalidad de su proceder y por sus costas puede que los transatlánticos que hasta ahora les han dotado de pingües beneficios no atraquen ante esta nueva etapa en sus costas y prosigan su viaje hacía otros puertos.

En definitiva, que una muestra significativa del poco valor a efectos legales en la decisión de algunos políticos catalanes por separarse de España deja sin mención aspectos de suma importancia, como la deuda contraída, el impago a las farmacias, el empleo y la sanidad, la educación adecuada al progreso y el pluralismo mundial de una formación enmascarada en idealismos superfluos que en nada ayudan a solucionar el principal problema de todos los españoles sin nombrar el origen de unos u otros como es el desempleo.

Toda esta situación no deja de servirnos para alimentar la imaginación, dándonos cancha libre para tomar las cosas como a cada cual convenga; es un momento atípico de nuestra democracia, una amenaza para el equilibrio de la nación y una falta de responsabilidad de los que siguen encaramados al síndrome independentista como única solución de supervivencia. En estas puede que lo del primer ministro británico David Cameron inmerso en una serie de peticiones a Bruselas con las que calmar a la sociedad inglesa obcecada en salir de la Unión Europea sea una mera artimaña con la que beneficiarse de un nuevo sistema personalizado a los deseos de sus ciudadanos. Entonces ¿Porque no será esta misma circunstancia aplicable a los anhelos del Sr. Mas y con ella acelerar el impulso renovador de una posición encauzada a llevarse al huerto beneplácitos del Estado y su Administración? Al fin y al cabo, si con ello los catalanes toman la iniciativa contraria a la de los británicos saldrán airosos de tan desproporcionado intento por lograr más que los demás participes. En el caso del Sr. Mas la opción es salir de España y lograr estar en la UE, en el caso del Sr. Cameron es no salir de la UE y confirmar la fuerza de su moneda; ¿Es o no es un lío de desvarió rayano en la más completa insolidaridad y dotado de una estrategia injustificable??

Malos tiempos para la independencia catalana peores para un líder en decadencia que debería salirse de un populismo sobrado de incoherencias y el momento adecuado para comenzar a confeccionar bases con fundamento una vez pasadas las Generales del 20-D en el que los responsables de todas las ideologías refrenden la opinión ciudadana en vías de una convivencia acertada, cuidando al máximo los requerimientos de las diferentes regiones que conforman España sin perder su cultura, idioma o sentido sociocultural.


Etiquetada en...

Comentar esta noticia

Normas de participación

Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.

Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.

La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad

Normas de Participación

Política de privacidad

Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.162

Todavía no hay comentarios

Quizás también te interese...

Quizás también te interese...

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.