Tal y como estaba previsto, en la tarde noche de este sábado, 26 de septiembre, a las 20:00 horas, se pudo disfrutar del magnífico concierto de órgano. El mismo, se encuadra en el IV Ciclo de Conciertos de órganos históricos de Gran Canaria, junto a los ya celebrados en la Iglesia de San Francisco y la Catedral, respectivamente. Resta, tras el de este sábado, el de Agüimes, el próximo 12 de diciembre.
El acto comenzó con las palabras de la coordinadora del Ciclo, Rosario Álvarez Martínez, a la sazón Presidenta de la Real Academia Canaria de Bellas Artes, quien hizo una breve semblanza tanto del programa como del concertista. Le tocó el turno en esta ocasión a Esteban Landart, nacido en Irún y con una dilatada carrera como organista y profesor de dicho instrumento, de lo cual dio cumplida cuenta durante el desarrollo del concierto. Fueron cinco las obras interpretadas, correspondiendo a otros tantos compositores, tras la introducción de la coordinadora del Ciclo.
Así, durante casi cincuenta minutos, interpretó magistralmente obras de Lothar Siemens, César Franck, Charles Tournemire, Johannes Brahms y Franz Liszt, respectivamente. El público asistente, no muy numeroso para la excepcionalidad del evento, aplaudió con entusiasmo cada una de las interpretadas, brindando un caluroso y dilatado aplauso al final del concierto, gesto que, desde el coro donde se ubica el órgano, agradeció el intérprete. Eso sí, quizá no estaba previsto o no hubo insistencia por parte del público, se echó en falta una propina final.
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