ALPA-NC aboga y defiende la necesidad de limpieza en las elecciones del 24 de mayo

El próximo Domingo 24 de mayo, se celebra uno de los actos fundamentales de la Democracia, las elecciones electorales, en las que el ejercicio de la participación de la ciudadanía es esencial, y garantiza la consagración de los principios democráticos.

El acercamiento de las y los ciudadanos a las urnas para emitir su voto, debe gozar del absoluto respeto de todas las formaciones, evitándose cualquier acción que pueda vulnerar el legítimo y libre ejercicio del derecho de sufragio, para que la voluntad de las y los electores no sea adulterada, y no se produzca un falseamiento del resultado electoral.

ALPA-NC (Alternativa Ciudadana por Agaete-Nueva Canarias) muestra una gran preocupación porque el respeto a la libertad de la ciudadanía en el ejercicio de su derecho al voto sea plenamente garantizado y protegido. En época de crisis como la que vivimos, por la mala gestión de los gobernantes, el empobrecimiento de las familias y las situaciones de necesidad son elementos constantes que han obligado a los Ayuntamiento a mantener una labor de asistencia de recursos para responder al derecho de las personas a ser atendidos en su necesidades. Las prestaciones y asistencias municipales a la población sin recursos económicos, deben ser entendidas como lo que son, un derecho de la ciudadanía y un deber del Ayuntamiento. Y, jamás se pueden interpretar como un acto de generosidad privada del gobernante.

En algunos lugares de la geografía española se han abierto expedientes policiales y judiciales por posible corrupción electoral, por medidas como la de gestionar y convencer a personas que precisan de ayudas públicas para que emitan su voto por correo, o bien la entrega de dádivas y obsequios al votante, o el ofrecimiento de futuros contratos de trabajo.

Por ello, en ALPA-NC consideran que todo tipo de acción dirigida a adulterar la voluntad de los votantes debe ser perseguida, y denunciada por quienes tengan conocimiento de la misma, pues es obligación de todos el velar por el sagrado ejercicio de los derechos democráticos.

Sólo así conseguiremos que la gran fiesta de la expresión popular sea efectiva y real. La Democracia es responsabilidad de todos.