El Aula de Pacientes Dr. Negrín ofrece un espacio para la prevención y tratamiento del linfedema

El Aula de Pacientes del Hospital Universitario de Gran Canaria Dr. Negrín, adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, ofrecerá a lo largo del año cinco sesiones de la escuela de prevención del linfedema, un programa puesto en marcha por el servicio de Rehabilitación en el año 2012 y en el que han participado ya 166 pacientes. El objetivo: disminuir la incidencia del linfedema en la población, así como la detección precoz de este trastorno. Las sesiones serán impartidas por rehabilitadores y fisioterapeutas.

El linfedema consiste en el edema (hinchazón) en el brazo en pacientes intervenidas quirúrgicamente de cáncer de mama. Puede adquirir carácter crónico, y afecta a una de cada cuatro mujeres con cáncer de mama. Es una de las secuelas más importantes del cáncer de mama como consecuencia de la extirpación de los ganglios axilares. El linfedema limita tanto funcional como psicológicamente a la paciente, por lo que los especialistas consideran que su prevención es la mejor forma de combatirlo, lo que es posible con una información médica correcta y tomando las precauciones necesarias.

El objetivo del programa que desarrolla el servicio de Rehabilitación es prevenir la aparición del linfedema y que la paciente pueda participar en el autocuidado, que reconozca los síntomas desde el primer momento y acuda directamente al médico rehabilitador sin necesidad de tener que ser derivado por otro médico.

El programa incluye una sesión teórico práctica, impartida por rehabilitadores y fisioterapeutas, en la que explican a pacientes y familiares por qué se produce el linfedema, cómo se puede prevenir y los pasos a seguir en el caso de que se manifieste. Además, se les enseña a masajear la cicatriz, a realizar los ejercicios para recuperar la movilidad afectada y se les ofrece información sobre el cuidado de la piel y las precauciones a tomar, como evitar la ropa y joyas ajustadas, evitar esfuerzos y deporte intenso, no tomarse la tensión arterial, ni dormir sobre el brazo afectado por el edema, ni exponerse al sol, entre otras medidas.

Desde la puesta en marcha del programa de prevención del linfedema se ha ido incrementado el número de participantes: en el año 2012 asistieron 36 pacientes, 48 en el año 2013 y 64 en el 2014.