La asociación de vecinos Valerón de San Felipe, informa que en la tarde del pasado del viernes 20 de Febrero, una de las más concurridas de la semana, el muro que bordea la carretera que va desde San Felipe al Pagador, única vía de comunicación, cayó al mar debido a los embates de las olas que esta semana han golpeado, no tan insistentemente como otras veces, ese espacio.

Desde la entidad vecinal se indica que lo advirtieron lo avisaron claramente, lo gritaron a los cuatro vientos y no fueron esc uchados, ya que desde hace tiempo la Asociación de vecinos Valerón, del barrio de San Felipe, viene denunciando esa situación, ya que el barrio puede verse incomunicado por los efectos que las mareas tienen en el litoral norteño de nuestra isla.

La casualidad, la mala suerte, o la mala gestión de la administración competente, ha hecho que el trozo de muro que se cayó fuese el último reparado por el Cabildo de Gran Canaria.

Así la entidad vecinal expone que una de dos, o no se hizo bien la vez anterior, o no se hizo el mantenimiento adecuado, considerando que esto último es seguro debido al estado de deterioro en que se encuentra todo este tramo de carretera.

Según la asociación de vecinos, menos mal que la caída ocurrió en un momento en que la vía no era transitada, algo raro, porque la afluencia de vecinos y visitantes sobre todo en los fines de semana es mayor. También destaca que tampoco ocurrió cuando llegaban los niños del colegio en las guaguas escolares o durante el trayecto que realiza los servicios públicos de transporte, lo cual hubiera ocasionado a buen seguro una tragedia lamentada por todos, pero absolutamente evitable si las soluciones contempladas en diferentes propuestas se hubieran a llevado a término desde hace mucho tiempo.

Además señalan que las demandas presentadas ante todas las administraciones, competentes o no en la materia, no se han visto satisfechas, y se ven desamparados tanto por aquellos que deben ejecutar las obras adecuadas, como por aquellos que deben hacer valer los derechos de los que viven en ese barrio.

Desde la asociación de vecinos se teme que nuevamente sus peticiones de ayuda sean desoídas o se las lleve el viento sin que sean escuchados por nadie. Así, indican que Hacen oídos sordos, viran la cara para otro lado, y por lo que se ve, les dan la espalda, por lo que temen que la reparación sea otro parche más al problema y que éste no sea erradicado o resuelto como se merecen los vecinos de San Felipe ya que ésta es la única vía de acceso y comunicación con el resto de la isla.

La asociación de recuerda que les han prometido nuevos proyectos a realizar en el tiempo, pero está claro que los problemas están aquí y ahora, y que no pueden esperar más, que el peligro es evidente, que si no se actúa con rapidez y adecuadamente, las sospechas de nuevas caídas de muro o de cosas peores se conviertan en realidad y se lamentará posteriormente no haber hecho nada para evitarlo.

Recuerdan la responsabilidad civil y penal del titular de la vía, el Cabildo Insular de Gran Canaria, y de los que están al frente de las mismas. Así, consideran que los gestores son responsables de lo que pueda pasar y del alcance de las desgracias que su mala o nula gestión nos lleven.

Esperan que tomen consciencia de la gravedad de este problema y que resuelvan, de una vez por toda, la situación tan acuciante que los vecinos sufren y que no dejen para otro momento lo que ahora sí pueden hacer si se tuviera la consideración que los vecinos merecen.