Desafiar a la gélida tarde de enero para disfrutar del invernal ocaso en la presa de Las Garzas, en Santa María de Guía.
Aunque apetezca estar al abrigo del hogar, salir para abrir los ojos al espectacular paisaje que nos está dejando este invierno, despeja el alma y hace palpitar el corazón.
La tarde en la presa de Las Garzas se presenta con cielos nublados, con amenaza de lluvia, pero el verdor en las laderas, los patos haciendo de las suyas en el agua, la quietud del entorno, y la explosión de la naturaleza, calientan el pensamiento y estremecen al cuerpo.
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