
Esperando una de las celebraciones más importantes de las fiestas navideñas, la Nochebuena, los ciudadanos salen a la calle para disfrutar del alumbrado navideño. La ciudad de Las Palmas de Gran Canaria se sube al carro de la competición entre capitales y ciudades españolas para ver quién realiza el encendido más espectacular. En este sentido las zonas de Triana y Santa Ana acaparan los lugares en dónde la iluminación navideña se expresa en su mayor esplendor. Este año se ha comenzado con la iluminación de los barrios capitalinos para continuar con las áreas más típicamente concurridas.
Acercándose la noche del 24 de diciembre, las casi abarrotadas zonas comerciales son testigos del ajetreo y las compras propias de estas fechas en las que se conjuga tradición y modernidad, Papá Noel parece competir con los Reyes Magos o por lo menos ganar algo de terreno por aquello de tener más tiempo para que los niños y niñas jueguen con los regalos recibidos.
Las luces alumbran las ilusiones y las esperanzas de los que somos afortunados en disfrutar de estas fiestas pero no debemos olvidar que no todos tienen esa suerte. Debemos pensar, reflexionar y actuar para que las luces lleguen a la mayoría de los ciudadanos y alumbren también los deseos, ilusiones y expectativas de una vida más justa para todos.
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(Lary Armas Barroso)



































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