LA BRISA DE LA BAHÍA (262). Golpe magistral, de Jessica Anthony

Acabo de leer la última recomendación de José María Guelbenzu en Babelia, al que he seguido en los últimos tiempos y que me ha enseñado tanto. Y la novela en cuestión no solo me ha sorprendido, sino que me ha dejado con el paso cambiado, de tal manera que cuando me dispongo a bajar las escaleras de mi casa la novela regresa a mi imaginación, como si un acto de magia fuera. No solo me ha enseñado la autora Jessica Anthony, Golpe magistral, Gatopardo ediciones, Barcelona, 2025, las interioridades de una sociedad norteamericana del medio siglo pasado, sino que, además, ha sabido establecer un mundo de relaciones mayormente complicadas (¡así somos!) donde cada uno parece sobrellevar como una aventura continua su realidad: situación compleja que tiñe la existencia de una manera concreta y única. Los personajes se mueven en la historia de manera especial y los protagonistas se dicen las cosas desde otra perspectiva. O ni siquiera lo hacen, que de todo hay.

Les confieso que empecé la novela tres veces: debe ser que no estaba preparado; solo a la tercera me interesó sobremanera: una vez dentro, no pude parar y, a pesar de sus apenas 150 páginas, la historia viaja por mi imaginación y no deja de atosigarme. Realmente, su autora, Jessica Anthony, a la que descocía completamente, sabe lo que tiene entre manos y conduce sus capítulos de modo eficiente: persigue el deseo de una idea y en ella se centra, sin desviarse del camino trazado en principio.

Es tanta la dificultad que hay en este sendero de sensaciones que no solo quedan claramente esbozadas, sino que la imaginación del lector se dispara en sentido muy distinto al de la escritora. Y eso está bien. Y nos deja al final con un “golpe magistral” que ensombrece la vida y sorprende al adversario.

Esta partida de tenis la juega la autora con sus lectores, donde logra que nos cambie el paso y no nos dé tiempo a devolver la pelota. Por tanto, jugada perdida.

Sí, me ha gustado. Y mucho.

Juan FERRERA GIL