La miel de Valleseco destaca en el XX Concurso Oficial de Mieles de Gran Canaria con dos galardones y la Mejor Miel de la Isla

En la modalidad de apicultor aficionado, el municipio logró el 2º Premio en la categoría de Miel Monofloral de Orégano

Redacción Sábado, 06 de Diciembre de 2025 Tiempo de lectura:

Premiados en el concurso

El municipio de Valleseco volvió a reafirmar su papel como uno de los territorios más relevantes para la apicultura grancanaria tras obtener dos premios destacados en el XX Concurso Oficial de Mieles de Gran Canaria, organizado por la Consejería de Sector Primario, Soberanía Alimentaria y Seguridad Hídrica del Cabildo de Gran Canaria.

En la modalidad de apicultor aficionado, el municipio logró el 2º Premio en la categoría de Miel Monofloral de Orégano, obtenido por el apicultor Carmelo Suárez González, cuyo asentamiento apícola se encuentra en el Cortijo de Calderetas (Valleseco). Esta distinción reconoce la calidad y singularidad de una miel muy característica del entorno vegetal del municipio.

Además, en la modalidad profesional, Valleseco sumó otro reconocimiento: el 2º Premio en la categoría de Miel Multifloral Ámbar, otorgado a la marca Colmenar La Violeta, bajo la titularidad de Carmelo Iván Santana Quintana, también con asentamiento en el Cortijo de Calderetas (Valleseco). Este premio reafirma el valor de la zona como enclave óptimo para la producción de mieles aromáticas y equilibradas.

La Mejor Miel de Gran Canaria 2025

El certamen otorgó su máximo reconocimiento, la Mención Especial a la Mejor Miel de Gran Canaria 2025, a una miel monofloral de hortelanilla de la marca Colmenar La Violeta, cuya titular es Noelia Ascanio Quintana, con asentamiento apícola en el Barranco de Los Propios (Moya).

Esta miel se impuso entre todas las muestras por su excepcional perfil sensorial, convirtiéndose en la mejor valoración global del concurso.

Un certamen consolidado y en crecimiento

En esta vigésima edición participaron 63 explotaciones apícolas de la isla, que presentaron 76 muestras para su evaluación. Las sesiones de cata tuvieron lugar los días 3 y 4 de diciembre en INFECAR, donde un panel de once catadores oficiales valoró aroma, sabor, textura y características organolépticas de cada muestra.