El Sardina compite, crece y mereció más, pero la Atalaya aprovecha su ocasión

El encuentro disputado anoche en el Municipal de Sardina comenzó con un claro dominio del conjunto local. El Sardina C.F. salió con una presión alta, líneas adelantadas y un ritmo muy intenso, anulando por completo a una Atalaya muy joven, correosa y físicamente explosiva.

 

Durante ese tramo, el Sardina disfrutó de una ocasión clarísima para adelantarse, una acción que pudo haber cambiado el guion del partido. Sin embargo, el guardameta visitante sacó una mano providencial que mantuvo el 0–0 y, de algún modo, marcó el tono del encuentro desde el inicio.

 

Con el transcurso de los minutos, el Sardina siguió atosigando y recuperando muy arriba, impidiendo que la Atalaya se encontrara cómoda. Pero en los instantes finales de la primera parte el cansancio empezó a notarse: el rival fue ganando metros, posesión y calma, obligando a Enzo y su defensa a multiplicarse.

 

 

El gol visitante llegó precisamente en ese momento: una entrada por el sector izquierdo, balón raso atrás que atravesó el área, varios rechaces y finalmente un atacante de la Atalaya, totalmente libre de marca, empujó a placer para poner el 0–1 justo antes del descanso.

 

 

Tras el paso por vestuarios, el Sardina salió volcado, solidario y muy bien organizado, disputando cada balón como si fuera el último. La Atalaya no estaba cómoda, y el conjunto local logró avanzar metros, encadenar posesiones y meter al rival en su campo.

 

La dinámica mejoró todavía más cuando el rival se quedó en inferioridad numérica. Sin embargo, lejos de aprovechar para madurar el empate, la Atalaya decidió arriesgar buscando el segundo tanto sin haber cerrado el primero, lo que generó un ida y vuelta que no benefició al Sardina.

 

 

Pese al empuje, al esfuerzo colectivo y a una actitud impecable, el gol no llegó. Y así se escapó otra oportunidad de estrenar victoria en casa.

 

Goles de Enzo y Aday Jesús.

 

 

El Sardina sigue sin ganar en su feudo, pero el equipo transmite compromiso, solidaridad, implicación y crecimiento. Si mantiene esta línea de trabajo, los resultados llegarán más pronto que tarde. No hay duda de que el camino es el correcto.