Carta de agradecimiento a quienes aceptaron el desafío de Gera

El pasado fin de semana en la playa de La Aldea de San Nicolás se vivió una escena de solidaridad y humanidad. Gera, la perra guía de Luisa, se bajó del coche en silencio cuando tenía que volver a casa, tramando lo que sería toda una aventura de sábado para ella que involucraría a muchas personas, incluso desconocidas, en su búsqueda.

Al percatarse de la situación al llegar al pueblo y con la angustia propia de esos momentos, su propietaria trató de localizar a las personas que estaban disfrutando en el muelle, pero la falta de cobertura se lo ponía muy difícil. En ese momento se le ocurrió llamar al conocido Bar de Severo, famoso no solo por su pescado fresco, también por la cercanía y amabilidad de su dueña, Ginés, y de su hijo Adelto, quienes no dudaron en movilizar a todas las personas que se encontraban a su alrededor.

El Parque Rubén Díaz, El Muelle, La Caletilla, incluso llegaron a subir El Lomo del Carmen en busca de Gera, quien puso a prueba la solidaridad de vecinos y visitantes. Finalmente y, después de haber planteado un desafío que fue superado con mucho éxito, Gera apareció en el pueblo, sentada en la puerta de su casa con su arnés y su correa. Como si nada hubiera pasado.

Tras unos días y con la serenidad brindada por el paso del tiempo, Luisa Hernández quiere enviar un mensaje de agradecimiento a todas las personas que se implicaron en la búsqueda de su compañera. Agradece el apoyo desinteresado de tantas personas, que le recordó que existe una cadena de solidaridad humana capaz de movilizarse y transformar un gran susto en una enseñanza mayor.

Muchas gracias a todos y todas.