
Desde hace tiempo, vecinos y usuarios de la playa de El Agujero en Gáldar vienen reclamando una solución sencilla pero vital: la instalación de bandas reductoras de velocidad, conocidas como “lomo de asno”, en la transitada Avenida La Guancha, junto a la primera línea de la Playa de El Agujero.
La urgencia, según comentan los denunciantes es real. Hace un tiempo, una niña fue gravemente atropellada en esta misma calle debido a la excesiva velocidad de los vehículos señalando que son frecuentes las carreras alrededor de la avenida. Este trágico suceso ha dejado claro que la seguridad vial no puede seguir esperando.
En este tramo conviven un parque (Mr. Leacock), una cancha descubierta de fútbol y baloncesto —de donde los balones suelen salir disparados hacia la carretera— y una pista de skate. Espacios pensados para el disfrute familiar que hoy se ven amenazados por el tráfico que catalogan como descontrolado.
Recientemente, el alcalde del municipio, Teodoro Sosa, posó para una foto frente a la nueva estación eléctrica en esta misma calle, pero, según afirman, sigue ignorando el verdadero peligro: aquí, unos simples reductores de velocidad pueden salvar vidas. Los vecinos nos señalan que han solicitado por escrito en repetidas ocasiones al Ayuntamiento y al Concejal de Tráfico, Pedro Mendoza Vega, que actúen cuanto antes. Sin embargo, hasta ahora solo han recibido silencio.
Por todo ello vuelven a reiterar la necesidad de hacer algo que garantice la seguridad víal en la zona, máxime en estos días veraniegos donde el número de usuarios de la zona aumenta de manera exponencial.
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