El pasado jueves 22 de mayo marcó un antes y un después para el barrio de La Atalaya y para muchos otros del norte de Gran Canaria. La constitución de la Plataforma Stop Planta de Biogás en La Atalaya es un hito que no debemos subestimar: por primera vez, son los propios vecinos y vecinas los que se están organizando para hacer frente a un desatino tan flagrante como la construcción de una planta de biogás a escasos metros del cementerio y del núcleo habitado del barrio.
Aquí no hay partidos, ni colores. Hay personas. Personas que han dicho “basta”. Personas que se niegan a convertirse en zona de sacrificio para el beneficio de una empresa privada. Personas que no están dispuestas a mirar hacia otro lado mientras se hipoteca la salud, el aire limpio y el futuro de toda una comunidad. La salud, el aire limpio y la dignidad del barrio no se negocian.
Sabemos que somos muchas y muchos más. Sabemos que hay quienes, por distintas razones, no pudieron acudir a la asamblea ciudadana. No importa.
Esta lucha sólo está empezando. El martes 27 de mayo comenzamos a organizar los grupos de trabajo. Habrá más momentos para unirse, más ocasiones para caminar juntos. Porque este camino lo vamos a recorrer en común.
No luchamos contra molinos de viento. Luchamos contra un grupo empresarial concreto, con nombre y apellidos: el Grupo Félix Santiago Melián. No es una pequeña empresa local. Es una corporación con recursos, intereses y poder.
Pero nosotros tenemos algo que no se compra: unidad, razón y territorio. Unidos, no nos vamos a dejar utilizar. Unidos, no vamos a permitir que decidan por nosotros.
Nos duele y nos indigna el papel que ha jugado —o más bien, que no ha jugado— el Ayuntamiento de Santa María de Guía. Ni el gobierno anterior ni el actual han tenido la decencia de convocar a la ciudadanía para informar de un proyecto de tal envergadura. La opacidad, el silencio institucional y el desprecio por la opinión vecinal son, por desgracia, la norma. Pero ya no más.
La comunidad ha despertado. Y no piensa callar.
Este proyecto no es sostenible. Y no lo es porque la sostenibilidad no se mide solo en cifras técnicas o económicas. La sostenibilidad debe ser también social y participativa. No puede haber desarrollo si este pasa por encima de la gente.
Si nadie nos preguntó, si nadie nos informó, entonces nadie tiene legitimidad para imponerlo.
Llamamos especialmente a la juventud a tomar conciencia. Este barrio también será suyo. Lo será mañana, pero hay que defenderlo hoy. Su implicación es vital. Porque lo que está en juego no es una parcela, es el futuro.
Es el momento de moverse antes de que sea tarde. Luchar y resistir no son palabras vacías: son los verbos con los que vamos a construir este proceso.
Tenemos un objetivo común. Y por encima de cualquier sigla política o interés particular, lo que importa es esto: evitar la instalación de la planta de biogás en La Atalaya.
No lo vamos a permitir. Porque no somos un número en un plano. Somos un barrio vivo. Somos dignidad. Somos comunidad.
Plataforma Stop Planta de Biogás en La Atalaya
Melquíades | Martes, 27 de Mayo de 2025 a las 08:03:14 horas
Me gustaría preguntar a la plataforma varias cosas:
1) Qué ilegalidades o qué normativa incumple el proyecto que promueve la empresa.
2) Qué datos del proyecto conoce esta plataforma que les llevan a afirmar que el proyecto "hipoteca la salud, el aire limpio y el futuro de toda una comunidad". Repito, de este proyecto concreto.
Esperando su respuesta, gracias de antemano.
Accede para votar (0) (0) Accede para responder