Dibujo original de Eugenio Aguiar
Conmemoramos este ocho de marzo, los cincuenta años de lucha en la calle del feminismo.
Es verdad que la lucha viene de mucho más atrás, y que las feministas del siglo XIX abrieron el camino que hizo posible que hace cincuenta años, sin miedo, las mujeres españolas, junto a las del todo el mundo, tomaran las calles.
Cincuenta años después, la esperanza no cesa. La esperanza de conseguir una sociedad igualitaria, en la que la mujer no esté tutelada por el patriarcado.
Este ocho de marzo, el feminismo vuelve a tomar las calles para demostrar que no hay marcha atrás, que los derechos conseguidos no serán fáciles de eliminar.
En estos tiempos convulsos, en los que parece que se impone la involución, el feminismo sigue firme, porque no es ideología sino la justa lucha contra una sociedad machista injusta, que invisibiliza, ningunea, maltrata, veja y aniquila a las mujeres.
La esperanza que no cesa, hace que avancemos, que caminemos con la cabeza alta, seguras, derribando obstáculos para vivir en libertad y en igualdad.
Ilustración: Eugenio Aguiar
































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