La Navidad en Arucas está repleta de momentos entrañables: visitar, por ejemplo, los distintos Belenes donde expertas manos han dado forma y creatividad a sus distintas propuestas es señal inequívoca de que hay gente para todo: desde los Belenes y Alfombras del Corpus hasta la transformación lumínica de la ciudad sirve para que la tradición no solo no desaparezca, sino para que se convierta en un motivo de encuentro. Encuentro que, desde distintas visiones, incluso con calima y otras tantas dificultades derivadas del intenso tráfico, se verifica para decir que vale la pena. Que vale la pena el vivir, el mirar y saludar debidamente. En una palabra: estar.

Claro que no es lo mismo el día que la noche. Por eso esta muestra fotográfica ha querido jugar con las dos posibilidades, más que nada para que observen las diferencias y los gustos se decanten. Es verdad que en estas Navidades de 2024 hay muchísima más luz. Aunque algunas propuestas cambien de sitio, siempre constituye una esperanza que se sustancie la existencia a través de pequeñas luces que se mueven, que viven como si fueran independientes y que desde su humildad luminosa brillen como si realmente estuvieran ancladas en el cielo. Se han convertido las Fiestas de Navidad en unas segundas Fiestas Patronales, donde cada ciudad, pueblo o villa trata de abrirse paso y significarse. Y singularizarse.

Los tiempos de ahora.

¡¡¡Felicidades a todos!!!

Galeria fotografica en este enlace

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