Reflejos. Juan FERRERA GILCuando el agua refleja el edificio que no vemos no solo se produce un segundo nacimiento, sino que la visión se agranda y magnifica el resultado final: una mente privilegiada tuvo la idea que ha quedado plasmada durante siglos.
De lo que se infiere que todo lo anterior no era malo: hay oportunidades y diversas realidades que resultan siempre novedosas. En una palabra: cuando la inteligencia se pone al lado del ser humano, no hay tormenta ni temporal que arramble con el resultado final. La muestra es que durante siglos ha permanecido en su sitio.
Y eso es una hazaña difícil de alcanzar.
Juan FERRERA GIL































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