El Valle de Agaete regresa a Tamadaba

Suena en el amanecer de este jueves, 27 de junio, en El Valle de Agaete, un volador perdido en el cielo.

Se escucha el canto de los gallos y el ladrido de los perros, anunciando que ya luce el sol, y en las casas empieza el ajetreo desde primeras horas del día.

Hay que preparar el hogar para acoger a los que vienen de fuera, y hay que meterse en la cocina para que no falte el sabroso caldo y la rica ensaladilla rusa.

Durante toda la mañana no dejarán de sonar los voladores, un sonido mezclado con la querida melodía festiva.

Habrá quien dedicará las primeras horas para cumplir con la tradición, recorriendo el camino con el alma sosegada, pero mayoritariamente se esperará a que llegue la noche para compartir la jiribilla con los amigos y familia, con las mochilas preparadas y el corazón feliz, porque ha llegado el momento de volver a Tamadaba.

Tocará la banda en la despedida de los romeros, y al filo de la medianoche se iniciará el camino con la emoción en la piel y la mente bañada de recuerdos, y el anhelo compartido de que llegue el amanecer del día de Rama.