Ni Caldera ni Pinos de Gáldar, Montañón Negro de Fontanales de Moya

No es cuestión de abrir otro frente dialéctico con esto de la toponimia, pero si tenemos que afianzar los lindes, lo haremos. 

La gente del noroeste de la Gran Canaria llevan décadas entretenidas con la disyuntiva Atalaya de Guía o Montaña de Gáldar. 

Es un tema recurrente a nivel mundial, siempre los mayores piques surgen entre los pueblos vecinos. En sus formas radicales da pie al desarrollo del nacionalismo de Barranco, de Invernadero o Cumbrero, muy frecuente en la Canarias profunda. 

No nos resulta extraño expresiones que delimitan la no pertenecía a un territorio entre barrancos: ¡Ése no es de aquí! 

Sin entrar en posturas que están más próximas al comportamiento etológico. Sin pretender desarrollar un Nacionalismo de Montaña, lo que tenemos claro que el GPS está para algo. 

Hace tiempo, después de un accidente de tráfico junto al Montañón Negro, en el atestado de la Guardia Civil inicialmente ubicaron el incidente en el municipio de Gáldar, hasta que la benemerita, haciendo uso de la alta tecnología, apreció claramente que estaban cerca del pueblo de Fontanales, en el municipio de Moya. 

Señores, sigan ustedes entretenidos con la Atalaya de Guía o Montaña de Gáldar, pero el Montañón Negro y su Caldera es de Moya. 

Don Antonio Morales, presidente del Cabildo de Gran Canaria, de todos los barrancos y cumbres de la Isla: ponga la toponimia debida en los mapas y apunte bien con el GPS. 

Felipe Enrique Martín Santiago 

Hijo de José y Margarita Estrella del Barranco del Laurel.