
Últimamente tengo mucho tiempo libre para pensar, e intento mantener la mente dormida con cosas que no me generen estrés ni ansiedad, vamos que me atonto viendo redes sociales y vídeos en Tik Tok como cuando era más joven me atontaba viendo series de televisión.
Como ya he dicho en otros artículos me declaro usuaria y consumidora de todas las redes sociales más populares: Facebook, Instagram, Tik Tok… Me gusta, me entretiene, pero desde hace unas semanas me da por pensar en ¿porqué a las personas les gusta vivir su vida como si estuvieran en Gran Hermano contando lo que hacen las veinticuatro horas del día? La respuesta más obvia es la que todos están pensando: “para que las personas como tú estén entretenidas” pues sí, es una respuesta de lo más plausible. Pero es que, hasta las personas como yo nos cansamos de ver todos los días la vida (falsa) de otros a través de la pantalla.
Sí falsa, porque muchas personas proyectan una vida que no es cierta. Una maternidad perfecta con bebés perfectos y madres peinadas y maquilladas todo el día, viajes estupendos a lo largo y ancho del mundo, compras, compras y más compras. Todo eso lo tienen, ¿a costa de qué? De su privacidad, de su intimidad y la de sus hijos. De vivir todo el tiempo pegados a un móvil grabando hasta las veces que van al baño.
Ahora se han puesto muy de moda las llamadas “Instamamis” que son madres que hacen carrera en redes sociales exponiendo a sus hijos a la mirada constante de sus millones de seguidores. Sigo a varias, sobre todo a las que hacen un contenido que no es exclusivo sobre sus hijos, y un día una de ellas contó que en el parque habían reconocido a sus mellizas y ella tan feliz. No pude remediarlo y le pregunté: “¿No te da miedo”? Ella contestó que nunca llevaría a sus hijas a lugares donde no estuvieran seguras…vale, sí pero no es posible que sepa si entre sus followers hay algún pirado que puede llevarse a las niñas en un descuido…no sé, cuando se trata de menores me da muchísimo miedo.
Por otra parte, están las personas que quieren hacer ver que tienen una vida de fantasía cuando en realidad su entorno más cercano sabe que no es así. ¿Qué ganan con eso? El día que la burbuja explote el daño va a ser importante. Hay veces que me dan ganas de recomendarles que el dinero que se gastan en comprar seguidores lo inviertan en un buen psicólogo.
La vida se ha convertido en una continua carrera por sobresalir, por ser mejores que los demás, o aparentar serlo, por vivir como si fuera un reallity show de esos de la tele. Bautizos y comuniones que parecen bodas, bodas que parecen la final de la Super Bowl, revelaciones de género donde lo menos importante es el sexo del bebé. Celebrar todo por todo lo alto, es lo importante, todos los meses del niño como si fueran años, todos los años como si fueran bautizos, etc etc…
Todo esto me crea una contradicción porque, ¿me entretiene? Sí, ¿me parece una locura? También.
































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