"¡Más butifarra!"
Andan “los peperos y voxianos” (ya saben: la derecha extrema y la extrema derecha: “por la boca muere el pez”) dislocados con el lenguaje, que suelen exprimir hasta límites insospechados, y tan llenos de ilusión con sus mensajes odiosos, sus mentiras recurrentes y violencia verbal a tutiplén. Parece que ambos dos lucharan por ver quién dice la mentira más gorda, más grande y más “anormal”. Como viven en el mundo de la estulticia, han perdido toda referencia a la normalidad: siempre están enfadados.
Todo tiene valor si se convierte al día siguiente en un titular de prensa, aunque la mentira se utilice como argumento: cuanto más grande, mejor, pues ya se sabe que los votantes se mueven, algunos, por el impulso ancestral de la Reconquista. Acostumbran a vivir en el inframundo de la tontería, donde la tontura (¡qué palabra más tonta!) disfrazará las expresiones del tipo “me gusta la fruta” y “los melones”, entre otros disparates lingüísticos, para concluir que su visión del mundo es espectral: viven en una realidad paralela (=para lelos) donde lo fantasmal crece y se confunde con el terror.
Al final viene a resultar que se sienten unos incomprendidos. ¡Pobrecitos!
Efectivamente: “¡más butifarra!”.
Juan FERRERA GIL































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