Hace 100 años, del Palmar a La Santidad

El 22 de septiembre de 1923 -hoy hace cien años- mi abuela Felisa, su hermana Concepción y sus hermanos Isidro y Eladio salieron con todas sus familias en dirección al barrio de Arucas más cercano a las tierras palmarenses: La Santidad.

Tenían por allí parentela, ya que sus dos tías habían casado con Falcones de Santidad. Los hermanos Miguel y Gregorio Falcón, nacidos en Santidad e hijos de Juan Falcón Suárez y María Almeida Almeida casaron con dos hermanas, naturales de El Palmar en el paraje de Los Cantos. Miguel Falcón había casado el 10 de marzo de 1891 con María del Carmen Hernández Suárez y Gregorio Falcón el 22 de octubre de 1895 con Basilisa Hernández Suárez, hijas las dos de Vicente Hernández Martel y María del Carmen Suárez Hernández y tías de mi abuela materna.

Además mi abuelo paterno, el comerciante y político Sinesio Yánez Travieso era nieto de Manuel María de los Reyes Travieso Falcón nacido en La Santidad el 11 de octubre de 1846, hijo de Juan Agustín Travieso Pérez, natural de San Lorenzo en Tenoya y de María Falcón Suárez, natural de Arucas. El 17 de julio de 1871 casó en Teror con Antonia Ortega, natural de El Palmar e hija de José Ortega y Josefa Acosta.

O lo que es lo mismo, todo El Palmar tenía parientes en Santidad y todo El Palmar salió con ganas de fiesta hacia el barrio aruquense, atravesando el Barranco de Los Naranjos, La Casilla y la finca de Doñana.

Aquel día culminaban los vecinos de Santidad uno de sus más queridos anhelos: bendecir la iglesia que en el barrio construían desde una década antes y que dedicaban a la advocación de Nuestra Señora del Carmen

Inauguraban su primera ermita, cuyas obras estaban ya casi terminadas, e igualmente el retablo de la capilla mayor en el que sería colocada la imagen de la Virgen donada por el vecino Juan Déniz.

Tal como reseñara la crónica periodística “entre repiques y disparos de cohetes” engalanaron con ramas y banderas la iglesia, la plaza y calles del barrio. En la tarde, el clero se dirigió al domicilio de don Juan Déniz y tras bendecir la imagen la trasladaron en procesión al nuevo templo

Mi familia, que pasó todo el día en Santidad, recordaba aquel acto muchísimos años después y desde entonces tuvieron allí la posibilidad de acudir a una iglesia cercana al Palmar y que estuviera dedicada a la advocación de la Virgen del Carmen.

Llevaban los de Santidad en aquel empeño desde nueve años antes cuando la tarde del domingo 28 de junio de 1914, Santidad se celebró “con el concurso de extraordinaria concurrencia y el júbilo de todo aquel vecindario, el acto de la bendición y colocación de la primera piedra de la ermita que se ha de erigir en aquel lugar bajo la advocación de Ntra. Señora del Carmen”

Poco tiempo antes, tal como reseñara en su estudio don Julio Sánchez, una Junta promotora presidida por don Manuel López Guerra y formada por los vecinos don Manuel Reyes, don José Martín, don Tomás Lantigua, don Juan Déniz, don Antonio Jiménez, don Miguel Falcón, don José Suárez y don Manuel González, visitaron a don Manuel Luengo Prieto, Delegado del Gobierno “en demanda de que se dignara resolver la grave cuestión del agua que abastece el lugar, y el Sr. Luengo no solo resolvió coa suerte aquella enojosa cuestión sino que comprendiendo la importancia de aquel caserío y sus muchas necesidades, les prometió una escuela y una iglesia”

Promesa que comenzó a cumplirse con aquella primera piedra que se colocó con la presencia del obispo Marquina, el propio delegado del gobierno, el alcalde, los miembros de la Junta, y el pueblo del barrio, Arucas y todos los barrios circundantes.

El obispo entusiasmó aún más a todos los habitantes de Santidad cuando refiriéndose a la iglesia parroquial de San Juan dijo: “aquella de Arucas, que en breve será como una catedral el orgullo de este bello país, es la iglesia madre de todos los habitantes de la comarca. Pero las necesidades de estos lugares apartados hacen necesario la erección en ellos de ermitas y capillas en las que puedan tributar constantemente su culto a Dios y yo bendigo esta obra, y si pudiera, en cada lugar levantaría una iglesia”

En el local, destinado a la escuela y cuyas obras adelantan notablemente, fueron obsequiados los Sres. delegado del Gobierno y Obispo de Canarias con dulces y champagne. Con vítores y aclamaciones fueron despedidos luego por el pueblo en masa, y aún se sentían los ecos del regocijo popular de la Santidad.

El 18 de marzo de 1943 fue creada parroquia, el mismo día que lo era la de Nuestra Señora de las Nieves de El Palmar por el obispo Antonio Pildain. El primer cura fue don Miguel Arencibia Gil.

La iglesia de Nuestra Señora del Carmen de La Santidad ha sido siempre muy querida por los vecinos del terorense barrio de El Palmar; por lo que las obras de ampliación de la misma, proyectadas desde 1977, iniciadas en 1999 e inauguradas por el obispo Echarren la tarde del 12 de julio de 2002 se sintieron como un avance propio para El Palmar.

Que vaya por tanto como cronista de Teror y palmarense de raíz y corazón emparentado con muchos hombres y mujeres de la Santidad, mi felicitación por este centenario y mis deseos de que todos sus anhelos de avance y mejora para el propio barrio se cumplan crecidamente.

José Luis Yánez Rodríguez

Cronista Oficial de Teror.