Realización del muralLa Villa de Moya luce dos nuevos murales que utilizan como idea central el agua, elemento esencial en la vida del municipio.
El proyecto homenajea, por un lado, ubicado en la confluencia de la calle Cervantes con Padre Claret, los lavaderos, que antaño eran frecuentados por las mujeres para el lavado rutinario de la ropa y servían de lugar de encuentro para ponerse al día de lo que acontecía en el municipio.
Por otro lado, en el mural situado en La Fonda se visibiliza el entorno natural del municipio donde discurrían sus acequias y la Heredad de Aguas, edificio histórico representativo de la gestión del agua.
El artista Daniel Rodríguez Báez ha utilizado técnica mixta de pintura en spray y pintura plástica aplicada con brocha
Este proyecto ha contado con la financiación del del Instituto Canario de Desarrollo Cultural a través del proyecto Pueblos Creativos.






























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