¿Acoso laboral en Medio Ambiente?

A los amantes de los animales que siguen las andanzas de Pandora les informo que la tortuga sigue por la misma zona de la costa senegalesa que tanto gusta a las tortugas caboverdianas.

Con respecto a Pandora paso a informarles de la situación del Expediente Disciplinario que mi Jefe de Servicio estimó abrirme por haber trasladado la tortuga a la Cuarentena de Poema del Mar. Desde 2021 existe un Protocolo entre Cabildo - Poema y el Ministerio de Medio Ambiente para poder realizar esos traslados con la mayor eficacia. Aún así más de un mes después de haber solicitado el traslado, el Cabildo se reiteró en la petición y finalmente cuando el animal comprobamos que se estaba haciendo daño en la pequeña piscina de Taliarte, decidimos moverla a la Cuarentena del Poema por criterios puramente saniltarios. La rehabilitación tiene unos momentos y unos plazos y esa debe ser la prioridad a tener en cuenta. Algo que burócratas amantes del papel oficial puede que desconozcan.

Adjunto, para conocimiento público, borrador de las alegaciones que en su momento presenté en Recursos Humanos del Cabildo de Gran Canaria para defenderme de la acusación de desobediencia por la que en el Pliego de Cargos estiman que deben sancionarme con hasta seis años de suspensión de empleo y sueldo.

Creo que es muy bueno que nuestra sociedad conozca cómo es el actuar de algunos personajes en el Cabildo de Gran Canaria. ¿Cosas de la Ecoisla?

ASUNTO: ALEGACIONES AL PLIEGO DE CARGOS DE 3 FEBRERO 2023 EN RELACIÓN AL EXPEDIENTE DISCIPLINARIO 1512/2022 QUE SE SIGUE EN ESA CONSEJERÍA

SOBRE EL TRASLADO DE LA TORTUGA PANDORA A LA CUARENTENA DEL POEMA DEL MAR:

El CR de Tafira no dispone de instalaciones donde recuperar adecuadamente las tortugas marinas en rehabilitación. Por ello, históricamente, dado que, en su momento, el Gobierno de Canarias de quien dependíamos inicialmente hasta 1998, nos comunicó a través del, por entonces, Coordinador don Gorgonio Díaz Reyes, que “las tortugas marinas eran especies abundantes y cosmopolitas y que el Gobierno de Canarias no iba a gastar un duro en procurarnos de instalaciones para su entrenamiento”, decidimos poner en marcha una red de colaboradores gracias a cuyas altruistas cesiones pudimos disponer de las piscinas y tanque adecuados para realizar el entrenamiento de las tortugas. De esta manera las tortugas operadas en Tafira se han albergado, durante décadas, en tan dispares lugares como marisquerías y restaurantes como fueron las tanquetas del Restaurante La Fragata, en Sardina de Gáldar, o las piscinas de filtrado de marisco de las empresas Martín Dorado y Jaime Llorca en la ciudad de Las Palmas, o también en una piscina, construida exprofeso, por la Fábrica de Cementos SA de El Pajar, en San Bartolomé de Tirajana. También recuerdo haber albergado tortugas en piscinas privadas como la que puso a nuestra disposición el famoso ginecólogo galdense don José Pablo Martinón, en su chalet de Sardina de Gáldar.

Esta situación se mantuvo durante muchos años en que la pretensión del Gobierno era que no se trataran las tortugas y nuestro empeño era recuperar cuantas más mejor, aprender y enseñar al resto de Comunidades que era posible hacer un buen trabajo con ellas. Desde entonces las interferencias del Gobierno de Canarias, liderados, por el tal Gorgonio, han sido continuas y podemos afirmar que se mantienen a día de hoy pues Gorgonio dejó escuela en alguno de los actuales técnicos de la Oficina de Biodiversidad del Gobierno de Canarias y de ello, desgraciadamente para las tortugas, disponemos de multitud de pruebas. De hecho, las interferencias sufridas para rehabilitar en 2021 a Machote y en 2022 a Pandora surgen justamente de esa Oficina de Biodiversidad del Gobierno de Canarias.

Finalmente, el director del Instituto Canario de Ciencias Marinas de Taliarte, don Octavio Llinás, nos cedió una media docena de piscinas instaladas en un lugar oficial y perteneciente a la Administración Pública, por entonces perteneciente a nuestro Cabildo en Taliarte. Con el ICCM logramos establecer un Convenio de Colaboración para recuperar las tortugas y usar sus instalaciones. Una vez que esas instalaciones fueron transferidas a la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias, dependiendo ahora de la ULPGC, entramos en una fase sin Convenio y estamos allí, de prestado, en unas instalaciones que, por falta de mantenimiento, están arruinadas y suponen un grave peligro para los trabajadores y ante ese riesgo se debieron suspender las visitas de colegios y colectivos. Esa parte de las carencias tan graves en la atención a las tortugas marinas en Gran Canaria parece no importar a nadie en nuestro Cabildo ni en el Gobierno de Canarias ni en el Ministerio en Madrid. Qué raro que luego miren con lupa y entorpezcan nuestro trabajo de manera tan palpable. Algo raro me parece eso sí, desde mi ignorancia en politiqueo y contubernios.

A lo que voy es a demostrar que Taliarte no es una instalación del Cabildo y que según las órdenes que me dio por escrito el señor Magdaleno, Subdirector General de Biodiversidad Terrestre y Marina del Ministerio, no podemos mover tortugas de Tafira a ningún sitio sin solicitar permiso al referido Ministerio. Preguntado al señor Magdaleno, mediante email, de fecha 9 de agosto a las 12,50 horas (Cada vez que ingresa una tortuga, u otro animal marino debemos trasladarlo a otras instalaciones que no pertenecen a nuestro Cabildo. Tafira está a 300 metros sobre el nivel del mar y no disponemos de piscinas ni lugares apropiados. Los animales marinos heridos, accidentados o enfermos, se trasladan a instalaciones de la ULPGC desde hace ya más de tres décadas. Pretenderá usted que para llevar las tortugas a esas instalaciones situadas en Taliarte (TM de Telde) debamos esperar, con ellas metidas en una caja, a que desde Madrid nos manden la preceptiva autorización de traslado? Si es así confirme por escrito en el mismo Oficio que está pendiente de remitir, por favor) si es necesario realizar el trámite de solicitud de movimiento cada vez que nos ingresara una tortuga marina todavía no nos ha contestado a fecha de hoy. O sea, que cada vez que, desde entonces, trasladamos una tortuga de Tafira a Taliarte, estaríamos desobedeciendo, supuestamente, órdenes del Ministerio similares a las que motivan esta absurda acusación del expediente disciplinario.

Es más si ocurriera que nos ingresara una gran tortuga marina que no pudiéramos albergar en las piscinas de Taliarte por su tamaño, caso de las grandes tortugas laúd, no dispondríamos de lugar donde albergarla, razón por la cual no nos quedaría más remedio que, de manera urgente, utilizar la gran piscina de cuarentena que nos han ofrecido en Poema del Mar. Y así por supuesto que ocurriría si se diera el caso. Deberíamos esperar con la tortuga en la playa hasta que el Ministerio nos contestara que podríamos trasladarla al Poema? Dada la agilidad demostrada en contestar por parte del Ministerio, que no fue capaz, en varios meses, de respondernos al respecto del traslado de Pandora, pues, evidentemente, no. Y ¿ello supondría una acción de desobediencia por mi parte? Pues, a tenor de lo que estamos viendo en todo este procedimiento, es probable que fuera expedientado por mi propio Cabildo, siendo por tanto lo más recomendable dejar morir al animal en la orilla y no hacer nada por salvarlo.

Como responsable de la recuperación de la fauna silvestre en nuestra isla, según el Decreto de Transferencias precitado, dispongo de la necesaria autonomía de acción para realizarla allá donde sea más apropiado en todo momento, tanto con las tortugas como con los mamíferos marinos, como con las aves, mientras estas estén en fase de tratamiento y recuperación y no se haga exposición pública de los ejemplares donde ya intervienen otro tipo de autorizaciones. Y así venimos actuando durante décadas. Algo que, resulta evidente, el señor Magdaleno desconocía, quizás, como me informaron oportunamente sus compañeras en el Ministerio, por estar recién aterrizado en esa Subdirección General.

Parece difícil de creer pero al respecto de este nuevo Expediente, debemos considerar aquí que ya he sido expedientado anteriormente, a propuesta de mi propio Jefe de Servicio, don Luis Fernando Arencibia Aguiar, por salvar, en el inmediato pasado, a varios delfines de una muerte segura utilizando vehículos no apropiados. Lejos de felicitarme por el éxito conseguido, Luis Fernando decidió expedientarme por haberme puesto en peligro según las prescripciones del Servicio de Prevención. Pues lo normal hubiera sido dotarnos de medios y no machacar al técnico que consigue los resultados esperados para un hospital de fauna silvestre que no es otro que salvar a los animales que nos ingresan. Lo más curioso es que esos expedientes disciplinarios no se han materializado en nada, siguen ahí, pendientes de resolución, cuando justo inician uno nuevo. Sin duda resulta algo extraño y ya daré mi opinión de cuál es el sentido de tales disparatadas decisiones pues conforman parte sustancial de la defensa que debo citar y que es, ni más ni menos, el acoso laboral al que estoy sometido por parte de mi propio Jefe de Servicio y del Director General don Manuel Amador. Del referido acoso se adjunta la Reclamación Previa que ya se ha presentado en nuestro Cabildo como paso previo a su presentación en el Juzgado.

Con respecto a la posible desobediencia que se me pretende atribuir con el traslado de la tortuga Pandora, debo citar las siguientes cuestiones trascendentales:

1.- En 2021, tras muchos meses afinándolo, se logró concretar un documento por el que toda la mecánica para trasladar y mantener las tortugas en Poema del Mar quedó perfectamente explicitada entre esa empresa, el Ministerio y nuestro Cabildo. Vigente este documento de trabajo, las autorizaciones posteriores debieran tener la agilidad suficiente por parte del Ministerio, para que las tortugas realizaran su proceso de rehabilitación en los momentos que así lo exigiera la evolución sanitaria de las mismas, sin que este se viera entorpecido por cuestiones administrativas que ya quedaron resueltas en el documento precitado, donde todo está perfectamente reglamentado y que ya se puso en marcha en 2021 con el traslado a Poema del Mar de Machote.

2.- La solicitud para el traslado de Pandora se realiza desde el CR en tiempo y forma, con la suficiente antelación para que, llegado el momento, se realicen las actuaciones sanitarias necesarias. De manera harto incomprensible, algo que sencillamente debiera ser una autorización con todos los condicionantes preestablecidos de antemano, se bloquea durante meses por el Ministerio hasta el punto de que ya llega a ocasionar una grave paralización del proceso curativo de una gran tortuga marina que hemos logrado intervenir quirúrgicamente, salvándola de una muerte segura. Llegados a ese punto se actúa por mi parte con criterio médico.

3.- Dado que, como ya he dicho, y puedo demostrar, la tortuga precisaba un lugar más amplio donde poder recuperar masa muscular y fortalecerse tras un largo período de inactividad, solicité a nuestra Jefa de Servicio Administrativo que reiterara la solicitud para mover a Pandora al Poema de la que 34 días más tarde de hacerlo aun no habíamos recibido respuesta a pesar de estar en juego un ser vivo del que nos desvivíamos en recuperar. Me consta que se hizo esa reiteración el día 3 de agosto de 2022 por la letrada Sandra Ramos, que sustituía a Angelina Suárez al frente de la Jefatura de Servicio Administrativo de nuestra Consejería.

Al mismo tiempo contacté con Miguel Aymerich, funcionario del Ministerio, quien yo creía que continuaba siendo el responsable de la Subdirección General de Biodiversidad marina y terrestre, Oficina que debía tramitar la referida Autorización y con quien había logrado tramitar, en 2021, los permisos para colocar a otra gran tortuga, Machote, en Poema del Mar y también instalarle una baliza de radio seguimiento. El email de contacto y traslado de las peticiones seguía siendo el mismo y, sin duda, pudo inducir a mi error de que seguía siendo el responsable. Telefónicamente le explico a Miguel Aymerich la situación y el injustificado retraso que tanto daño estaba haciendo a la curación de Pandora, le expliqué que realizamos la reiteración y que, a la espera de respuesta, trasladaría a Pandora al Poema pero, dado que no disponíamos de permiso, lo haríamos solamente a la piscina de cuarentena y no al Deep Sea donde quedaría en exposición pública que era lo que sí debía autorizar el Ministerio. Así lo hicimos. En ese momento Aymerich quedó enterado de que iba a mover la tortuga y solo me contestó que intentaría aligerar la Autorización.

Lo siguiente que recibo es un email del señor Magdaleno quien había sustituido a Miguel Aymerich, cuestión que, como ya he dicho, desconocía por completo y de la que Aymerich no me había informado. De ello dispongo de oportunos emails y whatsaps.

Por todo lo expuesto considero más que probado que en todo momento he mantenido la obediencia debida en los diferentes apartados de funcionamiento de nuestro hospital y que la acusación de desobediencia es una falta inexistente.

Estas alegaciones no fueron tenidas en cuenta. La instrucción del Expediente continúa y ayer, 16 de marzo, se produjo el interrogatorio a don Manuel Amador Jiménez, Director General de Medio Ambiente del Cabildo, y a don Luis Fernando Arencibia Aguilar, Jefe de Servicio Técnico de Medio Ambiente. Ambas no tienen desperdicio. Les seguiremos informando en el convencimiento de que, conocer lo que está ocurriendo, será muy conveniente para tomar nota en las reivindicaciones a los políticos que, supuestamente, deberían de representarnos.

Pascual Calabuig Miranda