El Consorcio de Emergencias incorpora a 50 bomberos y cabos de 2018 a 2022

El Consorcio de Emergencias de Gran Canaria ha incorporado a 50 bomberos y cabos entre 2018 y 2022, de modo que la cobertura de la plantilla, tras la aprobación de una OPE en 2010 sin incorporaciones hasta 2018, logró ser incrementada del 77 al 91 por ciento en 5 años.

La OPE aprobada en 2010 no había generado incorporaciones por diversos problemas legislativos y burocráticos hasta que el Consorcio, con la llegada de un nuevo equipo directivo, la reactivó y logró desbloquearla en 2018, cuando se produjeron las primeras incorporaciones con 27 nuevos bomberos.

Además, en 2020 generó una lista de reserva que quedó conformada por 19 bomberos de los que ese mismo año se incorporaron 14. Al año siguiente, en 2021, se cerró la OPE de 2010 relativa a los cabos con la incorporación de cuatro y, ya en 2022, se incorporaron los 5 bomberos que restaban de la lista de reserva.

Con todo, a finales de 2022 las incorporaciones ascendieron a 46 bomberos y 4 cabos, lo que implica un incremento de cobertura del 14 por ciento hasta alcanzar el 91 por ciento. El Consorcio ya trabaja para completarla en su totalidad.

Plantilla

La plantilla del Consorcio está formada por 235 puestos de bomberos, cabos y mandos, y está dimensionada acorde a criterios de ingeniería técnica que establecieron en su creación 219 puestos para los 21 municipios, lo que finalmente aumentó a 235 para 19 municipios, es decir, la isla menos la capital y San Bartolomé de Tirajana, que tienen sus propios cuerpos.

La concepción del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria es la de un sistema de respuesta insular diseñado por tanto para cubrir el territorio de la isla con siete parques distribuidos de manera estratégica por su geografía más un octavo que se activa en verano.

El Consorcio de Emergencias cumplirá 20 años en julio, de modo que ha previsto la próxima aprobación de un plan de reposición compuesto por varias OPE para afrontar la denominada tasa de rotación negativa, es decir, la reposición de personal a medida que se jubile.

Recepción EPI y equipamiento por 890 000 euros

Por otra parte, el Consorcio ya ha comenzado a recibir y entregar a sus bomberos los elementos que integran los equipamientos de protección individual (EPI) que ha adquirido por 890.180 euros, cuyos adjudicatarios tomaron medidas a los bomberos en enero y febrero para el tallaje de las chaquetas y pantalones para su fabricación y entrega en mayo.

Esta compra se ha centrado en primer lugar en los equipamientos de intervención en fuegos estructurales, es decir en naves, edificios y viviendas, en segundo lugar en el equipamiento necesario para rescates en tráfico y fuegos forestales, y finalmente en las prendas necesarias para afrontar trabajos a bajas temperaturas como las nevadas de los últimos años, además de diversidad de complementos de seguridad.

Así, el ente ha adquirido 303 conjuntos de chaqueta y pantalón para intervención en fuegos estructurales, lo que incluye una tasa de reposición del 47 por ciento, y cuyo coste por conjunto es de 1.180 euros sin IGIC, a lo que se suman 1.760 verdugos -el pasamontañas que protege cabeza y hombros-, 807 pares de botas y los guantes para este tipo de intervenciones, elementos que ya han sido distribuidos al personal, a lo que se suman, los 509 EPI de intervención en rescates, tráfico y fuegos forestales más 471 pantalones adicionales, y 261 chaquetones polares, todo ello regulado por normativa europea.

Camiones y ligeros por 3 millones

Asimismo, el Consorcio adjudicó en mayo dos camiones de primera salida que serán fabricados expresamente para el servicio y cinco vehículos ligeros -tres de rescate y dos de jefatura y coordinación-, en proceso de adaptación a los requerimientos del Consorcio para su entrega, todo ello con un coste de un millón de euros.

A estos vehículos se suman la preparación de la salida a concurso de la compra de otros cinco camiones de primera salida de última generación por 2 millones de euros. Su incorporación permitirá que las próximas compras vayan destinadas a la renovación de cisternas y vehículos de altura.