“La Casa Verde” se viste de “Nosotras” (fotos)

En la tarde del jueves, 9 de julio, “La Casa Verde” de la Villa de Firgas se vistió de libro para presentar el primer trabajo de Judit Lorente Arencibia: Nosotras, un pronombre de dos, (Piediciones, 2020.)

El acto, debido a la asistencia de numeroso público, se tuvo que realizar dos veces por aquello de las nuevas normas sanitarias. Pero lo realmente significativo fue que, desde la sencillez más absoluta, dos palabras vienen a definir el agradable encuentro: alegría y valentía. Comenzó el evento con música de fondo a cargo de Luis Lorente que sirvió de contrapunto a las palabras de la escritora, presentada ésta por su prologuista, Arantxa Marrero, que fue la encargada de conducir con acierto y simpatía la presentación de “Nosotras, un pronombre de dos”.

Señaló Judit Lorente que “este es un libro de prosa poética, surgido a raíz de un poema, que se divide en cinco partes: enamoramiento, autoafirmación, conocimiento, revolución y crecimiento”. En sus distintas intervenciones, salpicadas por la lectura de fragmentos del libro por parte de distintas colaboradoras, indicó la autora “que el momento más difícil fue el de enviarlo a las distintas editoriales: unas dijeron que no, otras no respondieron y una dijo que sí. Luego vino todo el proceso hasta hoy.” “La portada es un corazón visceral con dos flores y el título fue un auténtico quebradero de cabeza, hasta que lo encontré en un poema que escribí hace ya algunos años”, dijo Judit Lorente. Asimismo, también manifestó que “el tema principal del libro es el amor, motor esencial de la vida”.

Arantxa Marrero en el prólogo del libro señala que “tienes entre las manos un pedacito de vida de una relación arcoíris. Una realidad no compartida por algunas personas que todavía hoy, en determinados contextos, la viven como un disparo directo al pecho”. Sin embargo, los que disfrutamos del acto vimos claramente que allí se hablaba de “un disparo directo al corazón de todas las personas”.

Ya dijimos antes que la alegría y la valentía rondaban por la sala de exposiciones de “La Casa Verde”, y eso se notaba en las miradas y las sonrisas de todos. De lo que se infiere que “La Casa Verde” no ha perdido su razón de ser.

Y un detalle: la mirada de la escritora al escuchar sus textos: toda una declaración de intenciones.

Felicitamos desde Infonorte no solo a la autora, que también, sino a todas aquellas personas que han aportado su grano de arena.

Enhorabuena!!

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