Marilia Monzón: 'le debo mucho a Gáldar'

La joven cantante Marilia Monzón, ha pasado unos días en Gáldar, descansado de la gira de OT, disfrutando de la familia y amigos, y haciendo un hueco para atendernos, y compartir con los lectores de Infonortedigital, sus experiencias y sueños.

¿Qué ha supuesto para Marilia Monzón la experiencia en Operación Triunfo?

Si tuviera que definirla en una palabra sería increíble y después, inolvidable. Yo siempre pensé que podía cantar aquí en mi pueblo, en las fiestas, pero poder cantar en televisión delante de toda España, para mí ha sido una experiencia brutal. He aprendido mucho y sobre todo he crecido como persona. Conocer a mis compañeros es de lo más bonito que me llevo porque hemos hecho una piña increible.

La niña Marilia quería estudiar medicina, luego estuvo a punto de matricularse en enfermería y de buenas a primeras, lo deja todo por la música, con tan solo 18 años de edad.

La verdad es que cuando me di cuenta estaba dentro de la Academia, sin hablar con mis padres, conociendo a los compañeros. Fue todo muy rápido, sin tiempo a procesar toda la información. Recuerdo que la primera noche me desperté y dije “ pero si estoy aquí dentro y no me lo creo”. La verdad es que sigo sin creermelo. Cuando pase todo esto, cuando termine la gira y tenga un tiempo para mí, seguro que voy a decir, la experiencia que he vivido ha sido brutal, es que todavía no me creo que haya pasado todo lo que he vivido.

¿En algún momento fuiste consciente de la que se armó en Gáldar para que Marilia siguiera en OT?

Sinceramente no me esperaba lo que pasó. Necesité varios días para que mis padres me contaran como Gáldar se había movilizado por mí. Es una pasada lo que se vivió fuera. La verdad, cuando llegué a Gáldar y me hicieron el recibimiento, tenía los pelos de punta, y viendo los vídeos que me ha pasado mi familia, solo puedo decir que mi agradecimiento es inmenso hacia mi pueblo. Y es que por encima de todo, le debo muchísimo a Gáldar, porque aquí empecé a cantar, aquí fueron mis primeras oportunidades.

Ya fuera de la Academia de OT, no has parado Marilia, hasta has llegado a Nueva York.

Sí. En poco tiempo la vida me ha cambiado muchísimo, pero sigo siendo la misma Marilia, sigo viniendo a ver a mi familia, a mis amigos, a mi pueblo, y los días que paso en Gáldar me sirven para relajarme, para disfrutar, pero sobre todo para no olvidar quien soy y de dónde vengo. Es cierto que en Madrid he encontrado un espacio para realizar mi carrera profesional, puedo componer mis propias canciones, pero a mi pueblo no lo olvido, y me gusta regresar y disfrutar de mi gente. Y quiero que sepan que aunque estoy volcada en mi carrera artística, busco un hueco para hacer estudios universitarios.

¿Cómo estás viviendo la gira de OT?

Cuando sales de OT piensas que todo no ha terminado porque tenemos la gira, y está siendo tal cual. Seguimos todos juntos, aprendiendo muchísimo, compartiendo mucho, y actuando hasta con un público de quince mil personas, como nos ha pasado en Madrid, lo que es alucinante. ¿Tú sabes lo que es venir de escenarios como Agaldar ante mil personas que para mí era increíble, y ahora son quince mil personas, con lo que conlleva de aprendizaje, de saber estar ante cámaras, escenario, etc?, es alucinante. Por cierto, los viajes en la guagua, todos juntos, son muy divertidos.

No olvidas nunca a tu tierra porque has pedido que la gira de OT venga a Canaria.

Estoy luchando mucho por eso. ¿Cómo mis compañeros se van a perder conocer este paraíso?. En eso estamos.

Y ya puestos en el tema, ¿te vamos a ver por las fiestas de Santiago de Gáldar 2019?

Vamos a dejarlo como sorpresa.

Fuera de la gira de OT, proyectos personales que ya tienes.

Pues he grabado un videoclip en mi islita y así mostrar los valores de mi tierra y estoy deseando que lo puedan ver. Cuando sales de OT te piden que tengas muy claro cual es tu estilo musical y yo me he decantado por lo latino.

Pero vamos a ver, si a tí lo que te gusta es cantar

Pues sí, tal cual, es que estoy haciendo lo que me gusta, viajando mucho, y cantando. Estoy rodeada de música que es lo que me hace feliz.

¿Qué queda de aquella Marilia que berreaba de pequeña, que estudió en la Escuela de Música de Gáldar, con profesores particulares, que se subía a los escenarios de las fiestas de barrios, que amaba la música, pero que tenía otras metas en su vida?

Pues queda todo porque sigo siendo esa Marilia, sigo manteniendo mi esencia. Lo único que ha cambiado es que me reconocen por la calle, que me llegan mensajes de América de personas a las que no conozco pero que les gusto como artista y eso es increíble, pero sigo siendo esa niña que iba al instituto en Gáldar, amiga de sus amigos, agradecida por la familia que tengo, y muy orgullosa de ser de Gáldar. Inmensamente agradecida por hacer realidad un sueño, pero con los pies en el suelo, sabiendo que tengo que luchar por lo que quiero.