Ante los recientes acontecimientos, la ciudadanía y cargos públicos de Agaete debemos comenzar una defensa a ultranza de la identidad y patrimonio de la Rama como símbolo del pueblo de Agaete.

Estamos asistiendo a una pobre copia y falsificación de nuestra fiesta mayor por parte del resto de municipios, que sin duda, perjudican la imagen y simbolismo que posee para nuestra gente y pueblo y que nos representa a nivel internacional. El simple hecho de que un municipio no posea una fiesta propia y original no es óbice para que falsifique y malogre la festividad de otro que sí la tiene, la ama y la siente, y no digo con esto que se produzca con mala fe, al contrario.

Pero considero que es una obligación de nacimiento y de sangre el que los vecinos de Agaete luchen por sus tradiciones e idiosincracia, porque el legado de sus antepasados y el orgullo de muchas generaciones de romeros se mantenga intacto y no se convierta en burda imitación, que como ya mencioné, sólo distraen y despistan al visitante y potencial turista de la que es la fiesta principal de la isla de Gran Canaria.

Por una Rama de Agaete, el Valle y el Risco únicas, inigualables y auténticas.

Fiesta de Interés Turístico Nacional desde 1972