Experiencia educativa en el CEIP Los Quintana: “aprendemos de la tierra”

El CEIP Los Quintana de Gáldar, cuenta desde el inicio de este curso escolar 2014/15, con un nuevo proyecto de mejora, su propio huerto escolar.

El desarrollo de este proyecto, señalan desde el centro,  pretende alcanzar los mínimos establecidos en los currículos de Infantil y Primaria, mediante actividades innovadoras y de investigación, tanto en el aula como en los talleres de huerto e invernaderos.

Se trata de usar el huerto escolar como recurso pedagógico que permita a los niños y niñas experimentar la importancia de la tierra, conocer el ciclo de su trabajo y valorar los alimentos que se obtienen de la misma, creando hábitos saludables desde muy corta edad, siguiendo, para ello, las mismas directrices que se llevan a cabo mediante el Proyecto de Salud que se trabaja en el Centro desde hace años, dentro del programa de Red Canaria de Escuelas Promotoras de Salud, donde se fomentan valores y hábitos positivos y saludables encaminados a conseguir que el alumnado valore la forma de vida sana.

También apuntan que a través del proyecto, el alumnado aprenderá los aspectos más importantes y elementales para llevar una vida saludable, fomentando el consumo de productos de nuestra tierra, cultivados por ellos mismos, así como el respeto por el medio ambiente, el reciclaje, el trabajo en equipo etc., demostrándose a sí mismos que todo esfuerzo tiene una recompensa, como podría ser la recolecta de los productos cultivados y los beneficios para el organismo por el consumo de productos naturales.

También se enumeran otros objetivos tales como: generar conciencia, que el alumnado adquiera sensibilidad por las cuestiones medioambientales. Promover el conocimiento del medio, sus elementos, las interrelaciones que en él se dan y también sus problemas. Fomentar la adquisición de una serie de valores, que les motiven a interesarse y preocuparse por el medio ambiente. Capacitar al alumnado para que intervenga en la búsqueda de soluciones a los problemas ambientales detectados. 

Participar activamente en las soluciones propuestas. Conseguir una mejor relación con el entorno a partir de un cambio de actitudes y valores en los alumnos. Iniciarse en las tareas agrícolas de trabajo en la huerta. Conocer las técnicas de cultivo de la agricultura ecológica. Establecer y valorar las relaciones entre el medio natural y las actividades humanas.

Se trata, en definitiva, de un recurso más que se pone al alcance del alumnado para conseguir los objetivos propuestos y adquirir las competencias básicas a través de un aspecto fundamental como es el sector primario.

Aníbal Pérez Flores, el coordinador del proyecto, ha iniciado una aventura que en muy poco tiempo, ha despertado mucho interés, implicándose en su desarrollo toda la Comunidad Educativa: Equipo Directivo, la totalidad del Claustro de profesores del Centro, la Asociación de Madres y Padres diferentes empresas de la zona relacionadas con el sector como Ferretería Sarapio, Vivero José García, Viveros de Hortalizas Juan Francisco, Piensos San Isidro, las propias familias del alumnado y los conocimientos de la persona de mantenimiento del Centro. Todos han hecho posible que esta experiencia haya podido salir adelante, sobre todo por el buen acogimiento con el que lo ha recibido el alumnado, principal destinatario de este proyecto.