El oficial de la Policía Local de Teror, Manuel Ramos, se jubila tras 35 años de servicio

El oficial de la Policía Local de Teror Manuel Ramos Viera se ha jubilado este mes de enero como funcionario del Ayuntamiento de Teror tras 35 años de servicio en el cuerpo de seguridad municipal. Desde 1979 el sub Jefe de la Policía Local formó parte de la plantilla municipal, siendo actualmente el más veterano de los trabajadores del Ayuntamiento.

De su larga trayectoria profesional, Manuel reconoce que lo más que le ha gustado de su trabajo es la cercanía con la gente. "Siempre he intentado ayudar en lo que he podido y estar cerca de la gente en los momentos más difíciles" manifiesta Manuel, que durante tres décadas y media ha visto la evolución del municipio y de la seguridad municipal. "Cuando entré a formar parte de la Policía Local de Teror éramos 8 agentes. Era otra época, había menos medios pero teníamos que hacer de todo; había más cercanía y nos conocíamos todos".

Manuel Ramos reconoce que las competencias de la Policía Local han ido cambiando con los años y que los problemas a los que tiene que enfrentarse también han ido evolucionando. "Cuando llegué la policía estaba para todo, incluso asumía tareas que hoy realiza Cruz Roja o Protección Civil; no había tanto tráfico ni problemas de tipo social como pueden haber ahora. Ni se libraba los domingos ni había vacaciones de verano". Sin embargo, se siente muy orgulloso de haber servido en 35 Fiestas del Pino, 32 fiestas de su barrio natal, San Isidro, y en 3 Bajadas de la Virgen a la catedral de Las Palmas.

Su llegada a la Policía Local fue en diciembre de 1979 siendo alcalde Salvador Cárdenes, y en 1982 accedió a su plaza de funcionario del cuerpo de seguridad municipal. De esa época tiene Manuel un recuerdo especial del agente Antonio Ojeda, con el que sólo trabajó 4 meses pero le marcó para toda su vida. "Antonio era una persona caritativa y totalmente entregada a los demás. Como policía y como persona era ejemplar. Murió en 1980, pero siempre lo he tenido muy presente".

Nada más llegar a la Policía Local, Manuel tuvo que recorrer el municipio prácticamente a pie, para localizar los estanques tras la obligación de que fueran vallados. Según cuenta, esta tarea le permitió visitar todos y cada uno de los rincones del municipio, que "conozco como la palma de mi mano".

Manuel Ramos nació hace 63 años en San Isidro. A los 7 años quedó huérfano de padre, con cuatro hermanos, y tuvo que pasar su infancia en la Casa del Niño, hasta los 14 años cuando se trasladó a vivir a Piletas con su madre. Ha sido siempre un apasionado del deporte e incansable colaborador en asociaciones y eventos deportivos, hasta ganarse siendo más joven el cariñoso apodo de "polideportivo". Su incorporación a la Policía Local de Teror le permitió el regreso definitivo a su pueblo natal, donde se casó y tuvo dos hijos, hoy día ingenieros.

Quienes han conocido a Manuel Ramos saben de su excelente calidad humana y de su personalidad conciliadora a la hora de resolver problemas. El Ayuntamiento de Teror le rendirá próximamente un homenaje en agradecimiento a su buen trabajo y en reconocimiento a su excelente atención al ciudadano como agente de seguridad municipal.