Primer domingo de mayo en Arucas

El primer domingo de mayo en Arucas, Día de la Madre y de la Cruz, amaneció despejado y con muchos deportistas en los paseos, avenidas y en el entorno del Polideportivo Municipal. Corredores, caminantes y ciclistas se dieron cita desde temprana hora, más que nada para ponerse en forma e ir intentando recuperar la forma perdida. No en vano a la vuelta de la esquina está el verano y habrá que ir remodelando la figura, más que nada para aguantarnos nosotros mismos.

En la caminata que dimos por el centro y por la popularmente llamada Avenida del Colesterol (mejor, Avenida de Visvique) vimos a mucha gente tanto el sábado como el domingo. El paisanaje está deseando salir y en cuanto se han abierto las puertas los ciudadanos han empezado a adueñarse de los distintos lugares. Lo cierto es que este domingo pudimos realizar alguna que otra foto sorprendente: no había coches aparcados, y eso, para el que mira, es todo un lujo. Además, los saludos de amigos y conocidos volvieron al lugar de siempre, donde la alegría se manifestaba al ver al otro.

Y, en otro sentido, dos coronas a la entrada del cementerio aruquense: A todas las madres fallecidas, una, y la otra, el Ayuntamiento de Arucas. Un detalle. Y en el Parque de san Juan, en su escalinata superior, un “Gracias” permanente. Otro gesto.

En fin, Arucas parece despertarse de su confinamiento.

Solo queremos desear precaución y prudencia a todos y no olviden que estamos en una carrera de fondo y hay que dosificar las fuerzas. Que no es poco.